Camila

Les soy sincera, no tenía pensado escribir sobre este film argentino que data del año 1984, pero ayer se me metió en mi cabeza loca, que quería volver a verla, porque hay una escena en la película que ocurre en "viernes santo" que me mata. Y sí, soy una historiadora en potencia que le agrada conectar distintos contextos históricos, amo pensar e imaginarme cada día lo que ocurrió cientos de años atrás en la misma fecha. 

La primera vez que vi "Camila", fue en el año 2009, en una fría mañana de mayo o junio. Fue una de las buenas clases que tuve en "Historia de América del siglo XIX". Jajaja, aunque no era precisamente una clase, me gustó verla para recrear la atmósfera en la que se enmarca: Argentina del siglo XIX, cuando gobernaba J.M. de Rosas, en plena disputa de federales y unitarios. Ahora bien, la película es de corte romántico: un magnifico pero cruel romance, y por cierto, basada en un hecho real. 

He dicho en oportunidades previas, que no soy buena sintetizando películas, así que citare lo que señala el resumen de su propia directora, María Luisa Bemberg:

"En una hermosa casa colonial, con fuentes y magnolias en el jardín que mira al río, Camila O'Gorman toca el piano. No lejos, tañen las campanas de la Iglesia del Socorro donde oficia el presbítero Ladislao Gutiérrez. El destino teje su trama.

Camila, educada bajo las severas consignas de una familia tradicional, donde la virginidad y el acatamiento a las virtudes domésticas es un mandato, se enamora del joven jesuita. En un frío amanecer del 18 de agosto de 1848, Camila O'gorman y Ladislao Gutiérrez son fusilados. Los acribillados cuerpos de los amantes logran finalmente perpetuar el abrazo por el cual se les quitó la vida"

Jajaja, yo creo que de mi generación, la única que terminó rayando la papa con la historia de la película, fui yo. Tanto así, que estando un día en un centro comercial en Buenos Aires, mientras le ayudaba a buscar una cartera a mi mamá, noté que había un lugar que vendía series y film clásicos, obviamente corrí a ver si estaba y  llamé a mi papá. Como a él le gustaban tanto ver películas como a mi, accedió a comprármela  y apenas llegamos a Chile, la vi nuevamente,esta vez junto a ellos. 

Y hoy, es la tercera o quizás cuarta vez que la veo, y me sigo sintiendo tan representada en algunas de las frases que escribí en la libretita especial de películas, que quiero publicarlas acá. 

"Seguí, seguí , que las cartas de amor se marchitan si no se vuelven a leer" (abuela de Camila, a Camila)

"En los largos días estivales un insecto nace a las 9 de la mañana para morir a las 5 de la tarde. ¿Cómo va a comprender la palabra noche (...)  ¿Cómo vas a comprender tú la palabra amor, si nunca estuviste enamorado?" (Camila, leyendo e interrogando a su hermano cura, cuando comenzaba a sentir los primeros sentimientos por Ladislao)

"Yo, quiero alguien diferente, alguien de quién sentirme orgullosa, orgullosa quiero poder salir a la calle y quiero poder gritar su nombre, y decir este es mi marido y volver a gritarlo" (Camila a sus hermanas)

"Y es que acaso  no se da cuenta de lo que quiero decirle?, acaso no me quiere entender? (Camila en su declaración de amor)

"Yo no sirvo para amores secretos Camila, Solo puedo traerte problemas" (No le temo a nada, responde Camila)

"Ya que no hemos podido vivir en la tierra unidos, lo haremos en el cielo junto a Dios" (Ladislao a Camila)

Me da risa, ahora que destaco en negrita, ya que todas las frases que ennegrecí, las he dicho en persona. 

Uniendo por orden de frase destacada y que posteriormente he dicho y/o vivido:

1-Amo leer los correos que intercambiábamos con "alguien", es como mantener vivo algo. Y por eso, también amo leer epistolares.

2- Es la frase que siempre digo cada vez que alguien me juzga, por mi manera de amar.

3- Siempre la pienso, siempre mantengo la esperanza de poder salir a la calle y gritar lo mismo, y sentirme aún más orgullosa, de él.

4- Eso lo dije es una estación de metro. La mirada después fue demasiado electrizante.

Ya, mucha cursilería por hoy, si alguien desea recomendarme alguna película, libro, cuento, lo que sea de una historia de amor imposible y/o frustrada, bienvenid@ sea. 

Saludos y que tengan un buen fin de semana largo, y para quienes celebran esta fiesta de pascua, que el conejito se porte bien :). 

Antes de irme, imágenes de la película encontradas en la web: 

Una mirada "electrizante" como dije más arriba. 

Complicidad. Chicas/os enamorados, tomen una foto así

La verdadera Camila O'Gorman

Veo la luz al final del camino I

El título genera expectativas. Pero no, no he encontrado trabajo aún. Quise colocarle así al título de la entrada, ya que desde el día que la escribí, al menos no volví a caer en ese estado de angustia, que les juro parecía crisis de pánico. Les respondí en los comentarios, pero sinceramente valoro los minutitos que ocuparon en escribirme consejos y subirme el ánimo. Eso es una de las cosas que más valoro de tener una instancia como el blog para desahogarme (además de conocer a un montón de personas, que escriben sobre su vida y otros). Sin duda, leerlos, contribuyó a que viera la luz al final del camino. Ah, y también como esta semana eligieron al Papa y esa frase es medio católica, es acorde a los tiempos. (Jajaja, broma esto último.)

Yo hoy veo esto, espero que siga viendo lo mismo. Porfis.

Ya bueno, no me daré tantas vueltas. Si igual tengo algo que contar:

Me casó! Finalmente encontré el príncipe azul, que me salvará de mis penurias y pobreza, y me llevará a vivir a París. Jajajaja. Pucha, ojala estas líneas fueran verdad. No, mentira.

Resulta que hoy, me levanté y ayude a mi mamá en cosas de su trabajo. Ella es supervisora de prácticas docentes y tiene tanta suerte, que la llamaron para ofrecerle más cátedras y de pasadita le avisaron que le pagaran un magíster. Ah, y nunca ha presentado un curriculum en ninguna parte. Todo lo opuesto a mi. Jajajaja. La cosa es que ella siempre contesta el teléfono  Creo que eso nunca lo he puesto aquí, yo ODIO hablar por teléfono  O sea, tuve esa típica edad en la que llegué a hablar más de 3 horas con una amiga, pero fue hace mil ochocientos años y me saturó. Eso sí, no soy una antisocial ni mucho menos, si necesitan comunicarse conmigo, igual contesto, pero prefiero otras vías de comunicación. La cosa es que derrepente cacho que mi mamá le dice "Sí, Aída Paz siempre se acuerda de usted. Se la paso. Adiós." y me dice "Es Ruth"

La conversación fue más o menos así:

R: Oye, para que tienes celular si no lo contestas? (En tono super maternal)

A: Aaaah, es que ayer lo cargué y no lo prendí al levantarme. Disculpe, pero dígame. (Yo ansiosa, esperaba que me dijera algo positivo).

R: Te aviso que mande tu curriculum a recursos humanos de la Universidad, tienes la ayudantía.

A: ¿La de evaluación? (Yo no quería la de evaluación, no me sentía 100 % preparada)

R: No, es más bien de conocimientos disciplinarios históricos. Es para pedagogía básica.

Desde ahí, mejoró mi día. Una ayudantía nunca es bien remunerada. Sin embargo, abre un sin fin de puertas, y lo mejor para esta nostálgica mujer: me sigue conectando con la Universidad. Les juro que sentía un vacío el tan solo pensar que ya nada más me unía con aquel lugar que me acogió en tantos momentos de mi vida. De hecho el martes, fue la primera vez que volvía, esta vez como titulada. Y fue tanta la sensación de alegría y cobijo, que prometí que al menos una vez a la semana, volvería, ya sea a tomarme un café a la Biblioteca, lo que fuera, pero iría. Y si me pagan, por ir y ayudar en algo que me gusta, como es el conocimiento disciplinar mismo, muchísimo mejor. Así que feliz, iré nuevamente el próximo martes a las 8.15 am, como acordé con Ruth y con la cara llena de alegría.

Ah, sí. Estoy a la espera de una respuesta de una pega en un pre-universitario. Estoy anudando todo lo que tengo y proyectando las mejores energías para obtenerlo, pero esta vez con tranquilidad. Si se da, se da.

Saludos!

Frustración

Pensé unas mil veces si escribir esta entrada o no. Pero he decidido hacerlo, esta entrada me servira para valorar lo que encuentre posteriormente (sigo con mucha fe) y porque la verdad necesito desahogarme.

Hoy lloré a mares. Exploté. La típica vez por la que -creo- todas/todos hemos pasado, cuando uno abre esa llavecita que no se puede cerrar. Cuando el llanto brota, cuando el nudo de la garganta se contrae y se suelta, cuando dan ganas de un acurruco y que tu mamá te diga que todo va a estar bien, igual que hace unos diez años atrás. 

Puede parecer banal a esta altura llorar por algo así. Son tantas cosas las que me han tocado vivir, que siempre, lo que me ha permitido mantenerme de pie ha sido "ya llegará la recompensa". Y siempre así, pero hoy me aburrí. 

Mientras escribo, releo, me estoy dando cuenta que me he dado puras vueltas, y aún no expreso lo que me tiene así. Estoy así, por no encontrar pega. Me siento frustrada, con ganas de nada, y puros arrepentimientos. ¿Por qué estudié esto? ¿Por qué en mis años de u' no me hice más amiga de los profes? ¿Por qué no le hice la pata al director de carrera de Historia? ¿Por qué no me la jugué más en mi estancia en la pedagogía? Y con todas, no saco nada.

Llevo días sin lograr conciliar un sueño que dure toda la noche. Todas las preguntas que anoté más arriba, me rondan y rondan, y me dan las siete de la mañana, y no logro encontrar respuesta. ¿Que mierda he hecho tan mal, para que la vida no me recompense? 

Mi mamá me dice que no me desespere, que ya encontrare algo que será buenísimo que lo bueno tarda en llegar. Sin embargo, yo creo que eso me lo dice, porque cacho que el comentario que hizo el día miércoles en la noche, fue muy desafortunado. Me dijo "Ay, yo creo que tu no le haces ningún empeño en trabajar, tenis casi 24 y nunca le haz trabajado a nadie". Y eso, fue como un puñal. 

Y la verdad, es que nunca he laborado. Onda, tuve un par de ayudantías, pero menos de 25 lucas, en 5 meses, no se puede llamar trabajo, ni menos "sueldo". Como que en mi casa, siempre se me inculco, la idea de que mi responsabilidad única era estudiar. Y nunca sentí la necesidad tampoco, como por ejemplo tener dinero para comprarme las cosas que quería. De hecho sólo en el último tiempo, me he puesto un poco consumista.

Era la regalona. Eso no lo puedo poner en duda. Y es eso mismo, lo que hoy me hace falta. Lamentablemente en este puto sistema laboral, se entra por pituto, o por suerte. Y yo, no tengo ninguna de las dos. Me da rabia, y tanta rabia que sigo con el pecho demasiado apretado. Y se me caen las lágrimas si me pongo a pensar que las cosas con mi papá aquí serían muy distintas. Una, porque yo no estaría sufriendo por no encontrar pega, porque simplemente estaría en otro país sacando un magíster y dos, porque si no hubiera quedado en el magíster, mi papá me habría ubicado, pues él si que tenía contactos.

Y no crean que no he "movido" cartas por ahí. Resulta que cuando mi papá murió, un amigo medio extraño de él, me busco en facebook. Yo lo agregué. Se veía buena persona. Estimaba demasiado a mi papá, a pesar de que se conocieron solo un par de años. Una vez yo le pregunte a mi papá si ese cariño era reciproco, y él me dijo : Me cae bien, pero no podremos nunca ser 100% amigos. Cuando mi papá me dijo eso, yo lo encontré un poco egoísta de su parte, claro... porque yo solo había visto una parte de su persona.  Onda, los correos que le enviaba el amigo, cuando mi papi estuvo con licencia. Me he desviado del tema, pero a lo que quiero llegar, es que lo agregue a facebook y descubrí que el tipo era racista, clasista y roteaba a todo el mundo. Para él, los delincuentes deben morir. Y paradójicamente, mi papá lo conoció , trabajando en la cárcel  Cuatico. Le pedí ayuda. Me dijo que me ayudaría. Y hace un par de meses que no se  nada de él. 

Y el envío de curriculum: De los 57 curriculum que he enviado (número exacto). Solo dos, dos!!!! me han puesto "recibido". Yo sé que la gente que recibe curriculum, debe recibir 8302820282 correos por día, que el mío debe ser uno más, pero la verdad, siempre he pensado que todos los empleos que publican en emol, y similares, deben ser suuuper transfugas. Yo tengo una tía, profe de inglés, que se paso un año completo enviando antecedentes por esa vía, y nunca nadie la llamó. Y a eso, precisamente, le temo. 

Tengo temor. Demasiado miedo. Tengo miedo, al fracaso. Tengo miedo, a cumplir los 24 en junio y quedarme sin salud, por estar cesante. Tengo terror, pero terror, a que yo sea la única que no logre insertarse en el sistema. Si yo lo único que quiero es trabajar, juntar dinero y seguir estudiando. No pido nada más.

Y por eso, hoy lloré. Me llamo la atención eso si como llegue a ese estado. Resulta que me estaba despidiendo de una de las mejores amigas de mi prima que hace reiki, y la verdad es que es super especial ella. A mediados de febrero, me hizo una sesión de relajación y fue potente. Sentí la energía del universo que dicen, les juro que no estoy exagerando. La cosa es que hoy me vio, me tomo el rostro y me dijo "tu no estás bien". Y yo, había estado más de una hora, con mi princesa, me había reído harto, pero no lograba sacarme el "peso" de encima. Y le dije "Es verdad Ani, estoy más o menos" Y explotó el llanto. 

Les conté. Habían unas 7 personas en el lugar. Yo soy, reacia a llorar en público. Pero exploté. Mi prima pequeña, me dijo "Paaaz, en que momento te fuiste a lavar la cara?" Inocente ella, ojala esa cara mojada, fuera solo agua. La abrace y le dije que tenía penita, y me seco las lágrimas. Te adoro mi pequeña. Y también estimo ahora mucho más a la Ani, porque gracias a su pregunta, pude desahogarme. Y me decidí a escribir esta entrada. 

Saludos.